El Carnaval gallego tiene su epicentro tradicional en Ourense, en el triángulo Laza-Verín-Xinzo, con sus peliqueiros, máscaras y cigarróns. Tiene fama internacional con sus domingos oleiros y fariñeiros. Y también tiene alguna versión urbana como con los merdeiros de Vigo. Pero hay un Entroido también espectacular, con una rica historia, mucho más al norte, en las tierras del río Ulla, a caballo entre dos provincias, que va desde Santiago de Compostela a Villa de Cruces, pasando por los ayuntamientos de Boqueixón, A Estrada, Silleda, Teo, Touro y Vedra. Son los Xenerais da Ulla, una fiesta cargada de color y tradición que merece un reconocimiento por sí misma.
Se trata de una celebración original de la comarca de A Ulla, con referencias documentadas en el siglo XIX, poco después de la ‘francesada’, la ocupación de Galicia por las tropas napoleónicas y la guerra que asoló el país en el año 1809. También se fija su origen en la revolución del 1846, que finalizó con la batalla de Cacheiras, con las tropas de cada uno de los bandos recorriendo los espacios en que hoy se mantiene vivo este carnaval. Los disfraces militares intentaría ridiculizar estos hechos históricos, siguiendo la antigua fórmula: ‘Tragedia+tiempo= farsa’.
Los personajes más relevantes de esta celebración son el Xeneral y los Correos a caballo que van disfrazados con atuendos militares de época y otros adornos también en los caballos. Acompañados de abandeirados, coros y comparsas, recorren las parroquias de la zona y representan diversas escenas, conocidos como atranques o altos.
Estos atranques consisten en un enfrentamiento dialéctico por parejas en el que se hace burla de asuntos sociales de actualidad. Las diferentes parroquias presentan incluso singularidades y mantienen sus trazos definitorios. La espectacularidad de este Carnaval tradicional gallego logra atraer cada año a numerosos visitantes a la comarca de A Ulla.
Aunque los días grandes de los Xenerais da Ulla son entre el sábado de Carnaval y el miércoles de ceniza, la fiesta comienza mucho antes. Cualquier día en las semanas próximas podemos encontrarlos recorriendo las parroquias y lugares a lo largo del día, dando “vivas” a vecinos y visitantes, acompañados de un “ejército” de abandeirados, coros, comparsas y parrandas e incluso Xenerais infantiles.
Aquí puedes consultar el calendario para el año 2020, que ya comenzó el 1 de febrero
Los personajes de este Carnaval hacen pantomima de los militares tradicionales, de sus atuendos y maneras de conducirse. Los ‘Xenerais‘ evocan los uniformes militares decimonónicos. En la cabeza llevan un llamativo “ tricornio” (bicornio) finalizado en plumas, frecuentemente de pavo real. Montan caballos ricamente aparejados, destacando el espejo que llevan adornando la cabeza.
Los “Correos” visten camisa con corbata, guerrera y pantalón y cubren su cabeza con la “gorreta”. Van en caballos engalanados con campanillas.
El “Abandeirado” suele vestir un uniforme militar, el más frecuente, aunque también lo puede ser de marinero, y lleva una bandera. “El rey y la reina” visten capas y en la cabeza llevan una corona. Según la ocasión o montan caballos o van en un carro. También hay un Coro principal, de bonito o de jóvenes”, formado por chicos y chicas vestidos normalmente con el traje gallego o de montañés, junto con un señorito y una señorita. Interpreta canciones con letras satíricas compuestas para la ocasión. Y a veces podemos ver un “Coro de viejos”, con gente de más edad, junto a personajes singulares como ”el viejo de los cuernos”…
En resumen, os Xenerais da Ulla encarnan una tradición que tiene sus pilares en la historia a la vez que en el humor que caracteriza el Carnaval. Todo un destino hacia una de las grandes citas de la etnografía de Galicia.
es un buen sitio me no me respondiste la pregunta de por que se llaman así