Dolor y distensión abdominal. Diarrea, estreñimiento, náuseas… Y una larga nómina de síntomas, a veces inespecíficos, que pueden indicar que eres celíaco. O no. Para salir de dudas, lo más probable es que tu diagnóstico tarde, de media, entre 6 y 10 años. Y para saberlo, necesitarás someterte a pruebas invasivas, como las biopsias. Sin embargo, este escenario puede cambiar más pronto que tarde. Un equipo de tres investigadores gallegos está diseñando un test rápido que podría detectar la celiaquía en 20 minutos. “De momento sólo tenemos una idea pero si conseguimos financiación, podría salir al mercado entre 6 y 12 meses después de hacer un prototipo”, señala Daniel Abella López, participante en el proyecto e investigador asociado al Centro de Química Biológica y Materiales Moleculares (CiQUS) de la Universidad de Santiago (USC).
Además, Abella López, junto a sus compañeros Adrián López Teijeiro —también del CiQUS— y Alejandro Failde Fiestras, vinculado al Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago (IDIS), acaban de ser galardonados en el Encuentro Internacional de jóvenes Emprendedores (EIJE 2023) que se celebró en la ciudad portuguesa de Viseu. El proyecto NBusCeliac Rapid Test, ideado por este equipo de Santiago, alcanzó el primer puesto en este encuentro, gracias a su propuesta de una prueba diagnóstica rápida que detecte la celiaquía, una enfermedad autoinmune provocada por la ingestión de gluten.
Como funcionaría?
Los test de autodiagnóstico popularizáronse se popularizaron con la llegada del coronavirus. La forma en la que funcionan estas pruebas, segundo explica Abella, no difiere en gran medida de su test para detectar la celiaquía. “Diseñamos uno de doble banda, semejante a los que permiten diferenciar entre gripea A y covid”, explica. Continúa detallando que para el test de celiaquía se haría una selección de anticuerpos, dado que es una enfermedad autoinmune, así como una banda de biomarcadores que midan el daño intestinal, característico de esta dolencia. “Lo combinaríamos con una cuantificación de microfluídica para ver si hay realmente ese daño en el intestino”, expone el investigador del CiQUS.
“Nuestro test también serviría para comprobar si el daño intestinal se reduce con el tiempo”
DANIEL ABELLA LÓPEZ, investigador del CiQUS
El objetivo de este test, segundo traslada Abella, es facilitar al máximo posible la detección de la celiaquía. Por una parte, para evitar que los pacientes tengan que esperar tantos años a ser diagnosticados. Por otra, para reducir costes en el sistema sanitario, puesto que se precisa anestesia y cirugía para llegar a un resultado claro, generalmente a través de la biopsia. “Estas pruebas son caras e invasivas para el paciente”, insiste Abella. Al tiempo, el investigador añade otra importante funcionalidad de su test: “También podría servir para evaluar la evolución del paciente y comprobar si el daño intestinal se va reduciendo con el tiempo”.
Pasos a seguir
A pesar de que ya hay algunos test en el mercado que permiten detectar la celiaquía de una forma semejante a la que proponen los tres investigadores gallegos, Abella asegura que son pruebas poco fiables y con un alto porcentaje de falsos negativos. Algo que están teniendo en cuenta en su investigación y que prevén reducir. Sobre todo, para mejorar las tasas de diagnóstico de la celiaquía. “Hay muchas personas con esta dolencia que no saben que son celíacas”, apunta. Según cita Abella, en España tan sólo se detectan al año el 30% de los casos. Teniendo en cuenta, además, que la prevalencia de esta enfermedad ya está en el 1% en los países occidentales. “Está aumentando no porque mejorase el diagnóstico, sino por cuestiones genéticas y cambios en las dietas”, aduce el investigador del CiQUS.
“Aumentan los casos de celiaquía por cuestiones genéticas y cambios en las dietas”
DANIEL ABELLA LÓPEZ, investigador del CiQUS
Para que su proyecto se haga realidad, necesitan financiación. Esto es en el que Abella, López y Failde están centrados ahora mismo. “Estamos tratando de ver cuál es la mejor vía: si contactar con empresas y vender la idea, montar nosotros una pequeña compañía por nuestra cuenta…”, explica el investigador. Pese a las dificultades, él recuerda que el desarrollo de este tipo de pruebas diagnósticas no es complejo y que, una vez que consigan el apoyo, su salida al mercado será rápida. “No es el mismo que desarrollar un fármaco, para lo cual se precisan modelos animales”, matiza. Por lo tanto, el siguiente paso es obtener dinero. Y el último, y tal vez el más importante, que el test de celiaquía finalice con los retrasos en el diagnóstico de una enfermedad que puede ser muy incapacitante.