Cuenta la leyenda que en el pico de los Tres Bispos se reunían los titulares de las diócesis de Astorga, León y Lugo. Es una anécdota improbable, pero sirve para ilustrar el carácter de frontera de esta emblemática cumbre de Os Ancares. De hecho, el nombre existe en otros lugares, como en Huesca, donde el pico Tres Obispos dicen que acogía concilios de los de Barbastro, Lleida y La Seu d´Urgell.
Historias aparte, la realidad es que estamos ante una cima mítica. Aunque ni siquiera es de las más altas de la zona, desde su cumbre tenemos un espectacular paisaje sobre los Ancares e incluso podemos avistar a lo lejos Ponferrada o los Picos de Europa. También es una ruta clásica y accesible para el montañismo.
La senda hasta la cima cubre 7 kilómetros, lleva unas tres horas y salva un desnivel de unos 500 metros. Comienza en la aldea de Degrada, donde se sitúa el hostal Campa da Braña, donde Pedro ofrece habitaciones, literas y platos caseros y contundentes elaborados por Juana. También tiene una gran chimenea que devuelve el espíritu en las noches de invierno y una barra en torno a la que discuten sus anécdotas los montañeros.
El primer kilómetro va por carretera hasta el albergue de Ancares, donde comienza la senda, perfectamente señalizada. Tras un kilómetro por esta senda dejamos a la derecha la bajada que nos conduciría a Cabanavella, también señalizada como Cabanas Antiguas. A partir de aquí, el camino es empedrado, mientras tenemos siempre a la vista la cresta afilada del Pena Rubia.
Al llegar a la Campa de Ortigoso, nos encontramos la vegetación más espectacular de esta zona de Ancares: el acebo. Más tarde, aparecerán los bosques mixtos de frondosas autóctonas, donde hay abedules, robles y fresnos.
Una vez cumplidos los primeros 4 kilómetros, llegamos a la campa de Tres Bispos. Desde aquí ya vemos algunos de los picos más representativos de Ancares, como el Mustallar o el Penalonga. Y, si vamos en primavera, tendremos ocasión de ver la explosión de narcisos que florecen en esta época. También podemos encontrarnos caballos y vacas que viven en régimen de semilibertad en estos montes.
La ruta se hace más dura a partir de aquí, con un largo tramo en ascenso que nos lleva a la última campa antes de atacar el desnivel final hacia la cima. Puede que los menos entrenados sufran un poco en esta última ascensión, pero estamos ante un pico de baja dificultad y, a tu ritmo, es apto para todos los públicos.
Las vistas desde la cima de Tres Bispos son espectaculares. Entre las rocas, podremos buscar algún ‘belén de cumbre’, con figuritas de Navidad que los clubes de montaña suelen dejar arriba en esa época. Y, desde aquí, podríamos continuar con la ruta bajando hasta la campa das ovellas y la Cabaña das Charcas. O atrevernos con una ruta para los más avezados, siguiendo el cordal por Os Penedoes, Pico Charcos, Corno Maldito, Pico Lanza y Castillín, para coronar el mítico Mustallar (1.935m). También podemos seguir la cresta para alcanzar en dirección opuesta el Pena Rubia (1.822 m)
Los siete kilómetros de regreso tienen una alternativa desde la campa de Tres Bispos, bajando por un bosque de acebo hasta el curso del río, haciendo la ruta casi circular. Si, por el contrario, optamos por lo más fácil, que es el camino, podremos hacer el regreso en poco más de una hora.
A la vuelta a la base, podríamos tener la suerte de que Marcial haya preparado su célebre caldo gallego en el Refugio de Ancares. Y terminar en Campa da Braña, donde en invierno su chimenea nos devolverá a la vida.
Flora y fauna:
Azores y gavilanes sobrevolarán nuestro camino, aunque será difícil que lleguemos a ver a los grandes protagonistas de Ancares como el corzo, el jabalí, el ciervo, o la marta. El oso apenas hace mínimas incursiones en esta sierra. A última hora de la tarde, desde la cima podremos ver rebecos que marchan a refugiarse a las cumbres para guardarse del lobo. En cuanto a insectos, llaman la atención los brillantes escarabajos coprófagos (Trypocopris pyrenaeus) que podemos encontrar sobre las bostas de vaca.
En cuanto a la flora, en Ancares hay árboles como castaños, robles, acebos, alisos y chopos junto a monte bajo con abundancia de brezo. Los pastos de alta montaña sirven para el alimento del ganado vacuno.
Datos útiles
Tres Bispos: 1795 m
Duración hasta la cumbre: 3 horas sin paradas
Desnivel: 500 metros
Es imprescindible llevar agua