sábado 27 abril 2024

Un eclipse de Sol como recurso turístico

Por Federico Abbondio*

Corrían los primeros días de marzo de 2016 cuando me informaban que en poco menos de un año se produciría un evento astronómico de características únicas en la Provincia del Chubut, Argentina: un eclipse anular de sol con un grado de cobertura mayor al 97% en varios puntos de la jurisdicción. Yo me encontraba trabajando desde hacía unos meses en el Área de Turismo Científico de la Cartera de Ciencia del Gobierno Provincial. Obviamente, no tardamos ni un segundo en saber que deberíamos trabajar en ello.

Observación del eclipse en Chubut.

Chubut se encuentra en el centro de la Región Patagónica, a unos 1.400 km de distancia de Buenos Aires y es la tercera provincia argentina en cuanto a superficie, limitando con el Atlántico, los Andes, y con las vecinas provincias patagónicas de Río Negro y Santa Cruz. Es conocida por sus maravillas naturales vinculadas a la observación de fauna marina como es el avistamiento de Ballenas Francas Australes, las Orcas y Pingüinos de Magallanes en su zona costera y en la Cordillera de los Andes, por sus Parques Nacionales y las actividades de invierno relacionadas con la nieve. Todo esto presentaba un interesante desafío para mostrar Chubut desde otros puntos de vista: desde la ciencia y su divulgación. Sustrato había. Y la mejor manera de hacerlo era desarrollando un proyecto de turismo vinculado a la divulgación de la ciencia. Y en este caso concreto vinculado a la astronomía. Así pues, decidimos organizar un macro-evento entorno al Eclipse Anular de Sol del 26 de febrero de 2017. Nos interesaba atraer a un tipo de visitantes de intereses más concretos. El turismo científico en general y el astronómico en particular suponían para nosotros un aliado estratégico.

El eclipse se prestaba para organizar distintas actividades vinculadas a la astronomía, la astrofotografía, y también en torno a otras áreas científicas. Solo teníamos que crear el marco ideal para que profesionales de la ciencia astronómica, aficionados y público interesado en contemplar el cielo, se sintieran atraídos por hacerlo desde Chubut. En ello residía nuestro objetivo.

El eclipse supuso la llegada de miles de visitantes y la presencia de Chubut en los medios internacionales

Sabíamos que la articulación y vinculación entre actores jugaría un rol fundamental para lograr la mejor experiencia para el visitante, por lo que trabajamos en red con las Administraciones Públicas, Universidades, organismos especializados y, claro, los municipios donde se llevaron adelante las observaciones del eclipse y las actividades asociadas.

Como la mayoría de los eventos astronómicos, éstos solo pueden ser divisados en una franja geográfica determinada. En este eclipse estuvo delimitada al hemisferio sur, siendo Chile y Argentina, los lugares privilegiados en América del Sur para su observación. En Argentina, la zona de observación óptima se encontró definida en una franja de unos 50 km de ancho que recorría, de oeste a este, la zona sur de la provincia.

En Chubut estas actividades se desarrollaron en diferentes puntos, centrándonos, por tanto, no sólo en la observación del fenómeno en sí mismo. Por ejemplo, en la ciudad de Esquel, sobre la Cordillera de los Andes, se organizó el II Workshop de Difusión y Enseñanza de la Astronomía (II WDEA), recibiendo más de un centenar de investigadores de todo el mundo, quienes realizaron infinidad de actividades dirigidas tanto para colegas investigadores como para el público aficionado.

También se realizaron charlas de divulgación científica, cafés científicos y muestras abiertas a la comunidad, así como observaciones solares mediante telescopios especiales.

Se trabajó fuertemente, tanto con el sector educativo, como con el público en general, sobre técnicas de observación segura de los fenómenos astronómicos.

Y más allá de las charlas divulgativas brindadas durante los días previos, se realizó una exitosa jornada de astronomía dentro del Área Natural Protegida Provincial “Bosque Petrificado José Ormaechea” vinculando geología y paleontología con astronomía. El día que las miradas estuvieron posadas sobre Chubut.

Para quienes estábamos en la organización y acompañamiento de las diferentes actividades, se acercaba el momento de mayor tensión, viajando desde hacía varios días de un punto a otro de la provincia, y esperando que el cielo se mantuviese despejado. Y, si bien, se venía siguiendo el pronóstico del tiempo y no se esperaba un cielo nublado, sabíamos que hay siempre ciertos márgenes de error en las predicciones meteorológicas. La secuencia del eclipse se daba de oeste a este, con una duración aproximada de tres horas y donde el “anillo de fuego” completo duraría menos de un minuto.

El primero en recibirlo en Chubut fue Facundo, un pequeño pueblo de tan solo 180 habitantes, asentado a pocos kilómetros de la mítica ruta nacional N° 40 y del sitio exacto de observación. El cielo se presentaba totalmente despejado.

Desde muy temprano, el lugar designado para la observación, fue colmándose poco a poco de espectadores, hasta contabilizar 1.700 personas. Facundo vio multiplicado por 10 veces su población en esta jornada inolvidable, que culminó con un gran almuerzo comunitario.

Créditos da imaxe e copyright: Simon Tang.
Créditos da imaxe e copyright: Simon Tang.

La sombra que iba generando la luna al interponerse entre el sol y la tierra continuaba su recorrido hacia el océano Atlántico, y llegaba el turno de la ciudad de Sarmiento. Muy temprano en la mañana, emprendieron la caravana hacia el sitio de observación más de 300 vehículos. En este lugar fueron cerca de 1.000 personas quienes se maravillaron con el fenómeno.

El recorrido iba llegando a la costa atlántica, y con ello el fin de la observación en territorio chubutense. El último lugar fue para Camarones, a orillas del mar patagónico. Y en este lugar tuve la suerte de estar presente desde el día previo.

El gran día llegó con un ambiente de ansiedad lleno de emociones, donde niños y adultos contemplaban el evento con visores caseros de vidrio de soldador y cartón, lentes especiales obsequiadas por la Fundación Astrónomos sin Fronteras, o bien, lo experimentaban con cámaras obscuras; en contraposición, se encontraban los astrónomos profesionales o aficionados con sus telescopios y grandes cámaras preparadas para la captura de imágenes que recorrerían el mundo.

Aquí, durante gran parte del fenómeno, el cielo se mantuvo despejado, pero a unos minutos de formarse el anillo completo, ¡el eclipse fue tapado por una gran nube!. Se imaginarán los gestos de quienes estábamos presentes. Aunque la naturaleza nos tenía un regalo, ya que solo a unos cuantos segundos de completarse el eclipse, como abriéndose el telón de una gran función, el cielo se despejó, permitiéndonos a las más de 2.500 personas congregadas, observar en su plenitud el denominado anillo de fuego. Una fiesta astronómica que seguramente quedará marcada en las mentes de todos aquellos que lo pudieron contemplar en un punto u otro de la provincia.

Y los números fueron contundentes. De las diferentes actividades llevadas adelante en la provincia, participaron directamente más de 8.000 personas. Los alojamientos y campings se mantuvieron al 100% de ocupación durante los días previos al evento astronómico. El sector gastronómico extendió varias horas sus jornadas debido a la gran cantidad de viajeros, y los locales de artesanía y productos regionales agotaron sus stocks.

Las repercusiones logradas en los medios de comunicación nacionales e internacionales resultaron espectaculares. Se hicieron eco antes, durante y después del eclipse, abriendo y compartiendo imágenes de Chubut al mundo entero, algo invaluable en cuanto a promoción turística, muy difícil de medir económicamente, y que aún hoy, continúa teniendo efectos positivos para esta provincia argentina.

En Chubut, en la Patagonia argentina, el turismo científico se encuentra en aumento tanto en lo relativo a su demanda como a su oferta , siendo una de las modalidades con mayores perspectivas de crecimiento. Se buscan modelos de turismo que sean sostenibles y explicativos, que hagan comprender a los visitantes el valor de lo que están observando y disfrutando. Por ello, el uso de certificaciones de turismo científico de nivel internacional, como es el caso de las española Observer.ScienceTourism permiten una diferenciación del producto, ordenando y potenciando su desarrollo, gracias a la promoción a nivel internacional como destino destacado de turismo científico, generando vínculos con agencias de turismo emisivas especializadas en este tipo de turismo a nivel global, agregando un sello de calidad a la actividad.

*Federico Abbondio. SECRETARIA DE CIENCIA, TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN PRODUCTIVA Gobierno de la Provincia del Chubut. Argentina.

La verdadera quinta provincia

Más de 6.700 kilómetros hacia abajo y cerca de 6.000 º C en su núcleo. Con esos datos parece imposible, al menos de momento, llegar hasta el centro de la Tierra. Tampoco en la ficción resultó fácil. En las novelas más famosas de Julio Verne dan cuenta de las dificultades, y ni siquiera en ellas, al final, los protagonistas son capaces de conseguir el centro. Pero eso no impide que el viaje sea igual de asombroso, porque como uno de los protagonistas de Viaje al centro de la Tierra le dice a otro: «No hay nada que embriague tanto como la atracción del abismo». Eso debe ser seguramente lo que sienten muchos espeleólogos, puesto que la práctica de esta ciencia se encamina bastante hacia ahí, hacia el estudio de lo más profundo: las cavidades subterráneas.

Las cavernas, afirman estos estudiosos, son verdaderas cápsulas del tiempo que ofrecen información valiosísima de millones de años atrás: el origen de la vida, en muchos casos. Y también la evolución del clima. Parece, por lo visto, que dentro de una cueva o sima, la división entre biología, geología o arqueología, estudiadas habitualmente por separado, es cada vez más difusa.

Descenso a unha das covas lucenses.
Descenso a unha das covas lucenses.

Desde que se tienen registros hasta hoy, la sima más profunda explorada y topografíada es Krúbera-Voronya (Georgia), y cuenta con 2.196 metros de profundidad descendidos en 2012 por un espeleólogo ucraniano llamado Guennadi Samojin. Un valiente que ostenta el récord mundial de descenso la una cavidad subterránea. Sergio García-Dils, otro valiente, en este caso español, la descendió en 2015 hasta los 2.144 metros. Una pequeña diferencia, sí, pero ahí abajo cada metro cuenta y puede suponer un nuevo récord y hallazgos ignotos.

En Galicia pueden existir cerca de un millar de cavidades subterráneas, un verdadero y abundante tesoro áún desconocido para la mayoría. La quinta provincia, como acertadamente señala nuestro colega Marcos Vaqueiro, al que grabé hablándonos de cavernas, dentro de la Cova da Ceza, en O Courel.

Marcos es ingeniero y cofundador del club Cetra y está doctorado en geología con una tesis sobre cuevas en granitos. Es uno de los más fervientes apasionados de este deporte-ciencia que conozco. Lleva ya topografíadas más de 90 cuevas gallegas. Forma parte de nuestro grupo de trabajo para la certificación como Destino de Turismo Científico Observer de la Cova do Rei Cintolo, localizada en Mondoñedo.

Rei Cintolo es una cueva singular, de siete kilómetros, la única de Galicia preparada para ser visitada, aunque solo en su parte inicial, unos 300 metros. Representa, en cierto modo, el emblema de la espeleología gallega, no solo por sus dimensiones y geodiversidad, sino porque fue la primera en ser explorada con fines científicos. Haciendo un poco de historia en este ámbito, se puede decir que los inicios de esta disciplina en Galicia van de la mano de esta cueva cárstica y de su primer explorador y estudioso: José Villa-Amil, arqueólogo de Mondoñedo y figura clave de la espeleología en Galicia. Él fue el primero, en 1867, en explorar de manera científica y topografíar parte de esta cueva.

Después de Villa-Amil, que abrió camino en Galicia, comenzó una ya larga tradición agrupada en la actualidad en clubes de espeleólogos pertenecientes a la Federación Galega de Espeleoloxía. Esta federación editó durante años a revista Furada, dedicada a la divulgación de este deporte-ciencia y de sus principales hallazgos en el territorio gallego. Vista desde hoy, la revista ofrece información totalmente genuina que de otra manera sería difícil de encontrar y aglutinar.

En la actualidad el club Cetra proporciona una interesante recopilación de publicaciones científicas, además de planos topografíados de las principales cuevas y proyectos que van desarrollando. Un trabajo técnico y científico verdaderamente valiososo para quien precise obtener buena información sobre esta temática en Galicia.

Plano realizado por José Villa-Amil.
Plano realizado por José Villa-Amil.

Aprovechando la Semana de la Espeleoloxía promovida por el Club Peña Trevinca Montañeros de Galicia y Cetra, decidí participar en unas jornadas de divulgación que estos clubes desarrollaron en Val do Lóuzara y O Courel. En esta zona la cantidad de cuevas es notable; probablemente sea esta sierra donde más cavidades se pueden encontrar en Galicia. Nosotros visitamos cuatro, dos en Folgoso y otras dos en Samos: Cova da Ceza, Traslalastra o Taro da Lastra, Cova Grande de Santalla y Cova dos Carballos II. En la misma sierra se encuentra la sima Aradelas, que con sus 142 m de profundidad es la más honda de Galicia.

También en O Courel se localiza la sima donde fue descubierta la pastora Elba y sus uros, mujer del mesolítico recién reconstruida por los investigadores del Instituto Universitario de Geología Isidro Parga Pondal (IUX) de la Universidad de A Coruña. Muchas son las publicaciones, proyectos científicos y tesis doctorales promovidas por el IUX y dedicadas a las cuevas gallegas: paleoclima, geocronoloxía, paleontología, pseudocarst, etc.

Para entrar en cualquiera de las cuevas citadas, todas en estado salvaje, es preciso llevar equipación idónea: casco con luz, botas de goma, ropa impermeable y guantes adherentes. En otras muchas se requiere cuerda, arnés y equipo de progresión vertical, además de una buena formación y preparación técnica. Son precisas también ciertas normas de conservación para no impactar más del debido estos espacios formados hay cientos de miles de años.

Recorrer una cueva significa muchas de las veces arrastrarse por el suelo, gatear sobre barro o agua, escalar rocas y meterse por pasos estrechos. Superados estos obstáculos, propios de cualquier expedición que valga la pena, y ya con cierto nivel de adrenalina en el cuerpo, podemos encontrarnos galerías impresionantes en las que cabría un camión entero, montones de estalactitas y estalagmitas, gours e incluso lagos asombrosos, de agua limpísima de unos 25 metros de profundidad, como lo de la Cova da Ceza.

Lo cierto es que el mundo subterráneo es riquísimo, y completamente diferente a lo que nuestra vista está acostumbrada a ver, por eso sorprende tanto. No obstante, también es frágil, y precisa de sensibilización de su riqueza para un mayor reconocimiento y respeto.

Casi todas las cuevas de O Courel, y también las del resto de Galicia, carecen de medidas de control físico para su acceso, esto provoca que en algunas de ellas, como en la Cueva Grande de Santalla, haya multitud de pintadas vandálicas difícilmente eliminables. En otras, puede acontecer que los hallazgos de restos de animales fósiles y objetos prehistóricos, corran el riesgo de ser total o parcialmente espoliados, perdiéndose información muy valiosa para todos.

En lo que corresponde a los usos turísticos de las cuevas, tantas veces controvertidos, excepto Rei Cintolo, apta para el turismo, pocas cuevas presentan una geomorfología sin riesgos para aficionados. Aun así, son un recurso científico y divulgativo que debe buscar fórmulas para ser conservado y divulgado.

En Rei Cintolo, donde optaron por un modelo de turismo científico pensado para todos los públicos, el hecho de ofrecer visitas guiadas muy controladas, y en determinadas épocas del año a grupos reducidos, implica estar sometida la ciertas normas. Hay mayores controles que en cualquier otra, tanto en las limitaciones de acceso físico como en lo relativo a medidas para proteger el propio karst. Que esté más controlada también ayuda a optimizar las investigaciones desenvolvidas sobre ella, y a mejorar la gestión y divulgación. El resultado de esta mejor gestión será un aumento de valor del recurso en sí mismo y del territorio del que forma parte.

La conclusión siempre es la misma: a mayor divulgación, mayor concienciación y mejor conservación de todos los recursos naturales.

¡Viajeros (científicos) al tren!

«Cierto, cuando usted abandone este templo tan ingenioso y sabio, no poseerá toda la ciencia de la materia, pero habrá adquirido inteligencia» (Le Matin, cita referida a la Exposición Universal de 1937 en París)

«El mundo es como un libro y los que no viajan leen sólo una página»
San Agustín

De pequeña me sentía fascinada por los grandes exploradores, supongo que de ahí y de la curiosidad que me generaban los libros de aventuras y descubrimientos nace mi interés por la ciencia y los viajes. Creo que establecía una asociación directa entre exploración, aventura y ciencia. No podía haber una sin las otras. Y aunque por aquel entonces no tenía muy claro que era eso de «hacer ciencia» o ser científico, parece que mi intuición infantil no me fallaba. El viaje es conocimiento.

Lo cierto es que desde siempre los mundos del turismo y la exploración científica han estado fuertemente conectados. Dudo que pudiese existir el Origen de las especies y la Teoría de la evolución si Darwin no se hubiese embarcado en el Beagle. Y seguramente buena parte de la fauna, flora y geografía de América Latina tardaría en ser documentada si no fuese por el naturalista alemán Humboldt, que recorrió buena parte de ese continente a principios del S. XIX.

El concepto de ‘turismo científico’ aparece en los años 90 del siglo XX

Podríamos seguir con ejemplos más recientes. Como Cousteau. Y Jane Goodall, Dian Fossey o Eileen Collins, quienes por cierto, además, rompieron todos los estereotipos con respecto a lo duro que podía ser para una mujer el trabajo de campo, tanto en tierra como en el espacio.

Pues bien, la primera noción de Turismo Científico a la que se refieren numerosos autores a partir de los años 90 y de la que derivan algunos productos turísticos, es una prolongación de todo este fenómeno. Hay más ejemplos. Y todos ellos servirían para contextualizar lo que hoy conocemos como Turismo Científico, Turismo de Ciencia o Turismo de divulgación científica.

No me resulta difícil imaginar que la primera duda que pueda surgir al lector de un blog de Turismo Científico sea precisamente acerca de su significado, del concepto, porque no está exento de «pequeñas» polémicas en el intento por definirse y regularse.  Desde esa  primera aparición en los años 90 refiriéndose exclusivamente a los investigadores que se desplazaban para realizar trabajo de campo, el turismo científico ha ampliado su público hasta convertirse en lo que es hoy: una buena herramienta de divulgación científica para todos los públicos. Y sobre esto no parece haber tantas dudas.

Aún así,  es en los últimos años cuando ha empezado a desarrollarse con más fuerza, debido, en parte, al cambio en las motivaciones turísticas de los nuevos perfiles de viajeros, que demandan mayor profundidad en el conocimiento de los lugares visitados. ¿Pero cómo definirlo entonces?

Feynman muestra la importancia del conocimiento científico, de su divulgación y de la belleza

En el libro «Qué te importa lo que piensen los demás» del premio Nobel de Física, Richard Feynman, encontré por casualidad un fragmento muy ilustrativo de lo que para mí es la esencia de este tipo de turismo. Lógicamente Feynman no habla expresamente de turismo científico, sino que pretende  explicar las razones que lo llevaron a él a hacerse científico. El libro es un clásico lleno de anécdotas graciosas que hacen que Feynman, además de un genio de la física, sea también un tipo muy cómico.

Dice así:

«Tengo un amigo pintor; a veces sostiene opiniones que no comparto. Toma una flor y te dice, «Mira qué hermosa es», y yo me muestro de acuerdo. Pero entonces añade, «Yo, como pintor que soy, puedo ver cuán hermosa es una flor. En cambio tú, como científico, la analizas y haces pedazos, y su belleza se esfuma». A mí me parece que está un poco chiflado. Ante todo, la belleza que él ve está al alcance de otras personas, y también de mí, estoy seguro. Aunque es muy posible que estéticamente yo no sea tan refinado como él, sé apreciar la belleza de una flor. Pero, al mismo tiempo, veo en la flor mucho más que él. Puedo imaginarme las células de su interior, que también tienen una cierta belleza. Pues no sólo hay belleza a la dimensión de centímetros; existe igualmente belleza en dimensiones mucho menores. Están las complicadas acciones de las células y otros procesos. El hecho de que el colorido de las flores haya evolucionado con el fin de atraer insectos que las polinicen es interesante: comporta que los insectos pueden ver los colores (…) Del conocimiento de la ciencia emanan toda clase de preguntas interesantes, que aportan a la flor misterio, excitación y sobrecogida admiración. La ciencia siempre suma. No se me alcanza cómo puede restar (…).»

Con este fragmento, Feynman nos muestra la importancia del conocimiento científico, de su divulgación, y de la belleza de profundizar en la naturaleza de lo vemos. Y este es, en definitiva, el objetivo final del Turismo Científico: ir un poco más allá de la simple observación, al tiempo que adquirimos recursos para entender mejor el funcionamiento de lo que nos rodea.

Ocasionalmente me ocuparé en este espacio de algunos lugares, ciudades y destinos de ciencia, naturales y urbanos, históricos o de actualidad. Porque la ciencia está en todas partes y es bueno que no pase desapercibida.

Del móvil al ordenador con toda seguridad

El desarrollo de la potencia de los teléfonos móviles los ha convertido en nuestra principal herramienta de comunicación. Sin embargo, para muchas tareas continúan siendo menos cómodos que otros dispositivos. Es por ello que el equipo de investigación del Grupo de Tecnologías de la Información de la EE de Telecomunicación de la Universidad de Vigo está desarrollando la tecnología Ancora, con la que pretenden sacarle partido a toda esa potencia pero trasladando su interfaz a dispositivos de manejo más cómodo, como un ordenador de sobremesa.

Felipe Gil-Castiñeira, director del proyecto, docente e investigador del Departamento de Ingeniería Telemática de la UVigo, nos explica que la tecnología, llamada Ancora I/O, «es una herramienta que permite interaccionar con datos complejos que están en el teléfono», pero usando una pantalla más grande y un teclado.

Además de la potencia, los terminales móviles permiten una privacidad y una confidencialidad mayor que otros dispositivos, y eso hace que las comunicaciones sean más seguras. Felipe pone como ejemplo de posible uso una aplicación de gestión bursátil, que «nosotros seguimos ejecutando desde nuestro móvil, pero sólo moviendo la interfaz a un ordenador tendremos más agilidad para trabajar sin poner en peligro nuestra privacidad».

Existen tecnologías similares, como Chrome Cast, de Google, o Mirror Link, de Nokia -empresa ubicada en Silicon Valley en la que estuvo trabajando Felipe-, pero no son lo mismo. Por una parte, Chrome Cast lo que hace es lanzar imágenes, no aplicaciones. Y Mirror Link sirve para conectar nuestros dispositivos móviles con vehículos. Ancora I/O «tiene un símil con un escritorio remoto, con la salvedad de que es el desarrollador el que decide qué partes se pueden utilizar en la pantalla remota y de qué forma». No es necesario hacer el volcado de datos, y a diferencia de una aplicación en la nube, no se tendrán que programar dos aplicaciones, sino simplemente distintas interfaces.

Ancora I/O no está orientada ya, como al principio, para consumidores finalistas, es decir, como una app instalada en el móvil. Se comercializará con empresas de software para que la integren en sus aplicaciones.

«El desarrollo del prototipo para Android está casi listo; ahora hay que pulirlo», comenta Felipe, que establece un plazo aproximado de 18 a 20 meses para su finalización.

El equipo de AtlantTIC desarrolla Ancora con el apoyo de la Axencia Galega de Innovación

El equipo forma parte de «AtlanTTic«, el centro de investigación en Tecnologías de Telecomunicación de la UVigo, y ha obtenido este año una financiación de 469.700€ del programa Ignitia, de la Axencia Galega de Innovación, Gain. Pero además de la financiación «tener personas que trabajaran con prototipos, que nos ayudasen a tener algo robusto, que funcione siempre, fácil de utilizar y simple es fundamental», comenta Felipe.

Ancora es el nombre comercial del proyecto que originalmente se llamaba UbiSmart. La creación de la marca, junto con el logotipo y la finalización del producto son también tareas que se llevan a cabo en la aceleradora Ignitia. Como el lema, «Full screen using interaction of rich Smartphone data» (pantalla completa usando la interacción con datos ricos de smartphones). Y es que para el equipo de ingenieros es el marketing y la comercialización del producto lo que más ajeno les resulta, y por ello valoran como importante el asesoramiento que reciben.

El proyecto, 100% UVigo, participó en la aceleradora Ignitia

El proyecto, que es cien por cien de la Universidad de Vigo, está formado por personal tanto interno como externo, y está en crecimiento. Están buscando un desarrollador o desarrolladora junior más, que les está costando mucho encontrar, porque «está todo el sector ocupado», comenta Felipe. Y es que en la programación de software en Galicia el paro es escaso, pero no por ello está dejando de haber fuga de cerebros. «Incluso la fuga es sólo de cerebros, porque hay mucha gente que está trabajando aquí para empresas de fuera, en remoto», dice Felipe.

«Se están haciendo cosas para apostar por un tejido de la alta tecnología, pero no estamos a la altura de Silicon Valley», bromea. «Hay un ecosistema emprendedor en Galicia, porque hay dos cosas, buena formación y vocación», reconoce el profesor de la EE de Telecomunicación. «Está saliendo gente que le gusta la tecnología, que está inquieta, que quiere hacer cosas y quiere hacerlas aquí, pero aún no tenemos lo necesario para retenerlos aquí».

A Ancora le queda seguir avanzando en dos líneas: la tecnológica y la mercantil. Por un lado terminar el prototipo y convertirlo en un producto. Y por otro, «establecer esos lazos con empresas de desarrollo en los Ancora I/O tenga sentido, ir a ferias… y todas esas cosas que necesita una empresa para avanzar».

3edata, destripando el territorio

Extraer toda la información posible que nos ofrece el territorio para poner en marcha proyectos de naturaleza muy diversa es el objetivo de la spin-off lucense 3edata, una empresa que a pesar de su corta trayectoria ya ha sabido encontrar un lugar para posicionarse en el terreno de la consultoría y la gestión de proyectos de infraestructuras, medioambientales o agrícola-ganaderos.

Toma de datos nun encoro

La captación de datos sobre el terreno mediante el uso de sensores, satélites, drones y avionetas es el inicio del proceso que lleva a la empresa posteriormente a elaborar un diagnóstico sobre las características del terreno y las posibilidades que existen para poner en marcha sobre el mismo algún proyecto o gestionar el que ya se está desarrollando.

Marco Rubinos, director de proyectos de 3edata, explica que la empresa nació en febrero de 2016 con la base del conocimiento y la experiencia desarrollada a lo largo de tres décadas por él mismo y sus socios Carmen Cillero (I+D) y Boris Hinojo (Tecnología) en el seno del Instituto de Biodiversidade Agraria e Desenvolvemento Rural (IBADER) del Campus de Lugo.

“Después de 15 años de trabajo”, señala Rubinos, “decidimos que era el momento de dar un paso más y crear un proyecto que permite transferir el conocimiento adquirido en la universidad hacia la empresa”. Pocos meses después de iniciar su andadura empresarial consiguieron una inversión de 180.000 euros y en la actualidad su volumen de negocio ya supera el medio millón de euros. Las perspectivas de crecimiento para los próximos años son muy positivas.

“Al venir del ámbito universitario y operar en un sector que aún no está muy maduro tenemos la posibilidad de desarrollar tecnologías que nos van a permitir poner en marcha nuevos servicios y mejorar los que ya estamos prestando”, indica el responsable de Proyectos de 3edata. La empresa fue seleccionada dentro del programa Via Galicia 2016.

La actividad de la empresa se centra en el ámbito agroforestal, con aplicaciones en el campo de la viticultura, la gestión de masas forestales y los cultivos. Pero, además, 3edata, opera en otros terrenos como la gestión de infraestructuras eléctricas. la monitorización de embalses o la elaboración de proyectos de I+D en el terreno medioambiental.

Su volumen de negocio supera el medio millón de euros con buenas perspectivas de crecimiento

La mayoría de los clientes son empresas pero 3edata también colabora con la universidad y otras administraciones a la hora de llevar adelante proyectos europeos. Actualmente, por ejemplo, la empresa colabora con la Universidade de A Coruña en la puesta en marcha de un sistema que emplea boyas y vehículos subacuáticos para la toma de datos en embalses.

Junto al Ayuntamiento de Lugo, 3edata se encarga de la gerencia de un proyecto europeo relacionado con la planificación urbanística y también trabajan con la Diputación lucense en otro proyecto europeo sobre ganadería extensiva. En el terreno de la consultoría cuentan ya con carga de trabajo para los próximos dos años

Este año ha sido el que ha permitido consolidar a la empresa y cara a 2018 está prevista la puesta en marcha de un plan de marketing con el que esperan poder incrementar la cifra de negocio a un ritmo de un 20 por ciento anual, además de continuar captando fondos para desarrollar nuevas líneas de actuación.

Diseños creativos con firma infantil

La idea surgió en la cabeza de una madre que comenzó a pensar cómo se podría aprovechar el talento que sus hijos mostraban al realizar dibujos sobre papel. En apenas unos años aquel suceso casual se ha convertido en una idea empresarial, que lleva camino de convertirse en un negocio de éxito. Mr. Broc cuenta actualmente con seis empleados y aspira a multiplicar su cifra de negocio a partir de 2018 con la nueva herramienta informática que ya ha comenzado a utilizar.

Sonia López (izda), fundadora de Mr. Broc

Sonia López Mera, fundadora de la empresa, explica que el proyecto comenzó hace tres años con ensayos realizados con la ayuda de familiares y amigos, pero el punto de inflexión se produjo en 2016 cuando se decidió pasar de un modelo de negocio artesanal a una empresa que, en poco tiempo, aspira a dar un salto hacia la internacionalización.

Lo que no ha cambiado es que los dibujos infantiles siguen siendo el punto de partida del proyecto. Estos bocetos pueden realizarse ahora de forma automática en la página web de la empresa (www.mrbroc.com) que cuenta con una herramienta llamada Broc Studio que permite ir realizando los bocetos e ir viendo cómo podrían quedar en los diversos objetos que podrían adquirirse con este diseño. La herramienta es gratuita y de acceso libre y solo se paga por los productos con los diseños ya insertados.

La fundadora de Mr. Broc se muestra entusiasmada con las posibilidades que ofrece esta nueva herramienta que ha comenzado a funcionar el pasado mes de noviembre y con la que esperan poder dar un gran paso adelante en el crecimiento de la empresa. “Nuestros desarrolladores informáticos han conseguido crear una aplicación que en cierto modo piensa y ofrece a los que dibujan las mejores alternativas para convertir su boceto en un diseño para un producto real”, indica Sonia López.

Los objetos incorporan los diseños realizados con una aplicación informática

Entre los diversos tipos de productos a los que se pueden incorporar los diseños se encuentran artículos textiles (bolsos, cojines, mantas polares, delantales, fundas nórdicas, etc), joyas en plata, vinilos y carcasas para móviles. Los objetos incorporan los diseños realizados con la aplicación y se envían para su recepción en un plazo máximo de diez días. El regalo familiar y los obsequios personalizados que los escolares deciden realizar a sus profesores son los nichos de mercado más claros para la empresa.

Mr. Broc divide su plantilla entre Vigo y Madrid y próximamente va a poner en marcha un ambicioso plan de marketing para optimizar las posibilidades de la nueva aplicación que acaban de lanzar. El proyecto formó parte de la cuarta edición del programa Vía Galicia y los desarrolladores informáticos que han diseñado la nueva aplicación han salido de universidades gallegas.

La innovación ha tenido y sigue teniendo un papel fundamental en Mr. Broc

Uno de los factores diferenciales de Mr. Broc frente a otras ideas similares es que los diseños finales son realizados de forma exclusiva y se tiene especial cuidado en comprobar cómo se adapta cada diseño al objeto al que se quiere acoplar. De esta forma, los diseños realizados a través de Mr. Broc cuentan con una apariencia muy personalizada que los distingue de los que pueden realizarse con otro tipo de aplicaciones.

López apunta que la innovación ha tenido y sigue teniendo un papel fundamental en la evolución de una empresa que tenía bastante claro desde el principio que tenía que ir perfeccionando las herramientas con las que iba a contar de forma paulatina. “No podíamos permitirnos esperar tres años para contar con una aplicación , preferíamos lanzar algo menos sofisticado e ir incorporando poco a poco nuevas funcionalidades basándonos en la experiencia que vamos acumulando”, añade la responsable de Mr. Broc.

La gastronomía mundial a un clic

Mercado Flotante nació con un propósito: que toda persona pudiera cocinar cualquier receta del mundo desde cualquier punto del país.

Era el año 2008 cuando a Miguel Briones, CEO de la empresa, en esa época gestor de grandes proyectos de banca, le regalaron un libro de recetas internacionales. «De todas ellas no era capaz de hacer un 95% porque no tenía donde conseguir algunos de los ingredientes», nos cuenta. Él marca este punto como el pistoletazo de salida del proyecto, pero no sería hasta el año 2015, cuando junto a Lorea Castroviejo, de Donosti, ponen en marcha la idea. «No creo que seamos unos visionarios, pero sabíamos que teníamos que esperar a que el sector de la alimentación se pusiera más de moda», dice Miguel.

El nombre de Mercado Flotante hace referencia a los mercados del sur de Asia en los que los vendedores llegan y venden en barcos sobre los ríos. Un nombre exótico para una tienda online de productos exóticos.

Os fundadores cunha caixa de pedido.

Miguel presume de que no han encontrado en España, «y por lo que hemos visto, en el mundo, una tienda con un catálogo de productos internacionales mayor que el nuestro». Con 4.800 usuarios y 1.000 clientes fijos, y a falta de incorporar productos frescos y congelados, Mercado Flotante se está haciendo un hueco en el sector del food tech online.

El éxito reside en tres pilares básicos. En primer lugar la amplitud de la oferta, que no es sólo de productos, también de marcas. La atención al cliente, que se nota desde el momento en que se busca cualquier referencia o valoración de la empresa. Muchas hablan del perfecto trato que se ofrece, de lo cuidadosos que son con el etiquetado –y por ello tienen una creciente comunidad de consumidores ecológicos y de veganos detrás- o de cómo cuidan los pedidos. Y en tercer lugar la innovación que están llevando a cabo desde Mercado Flotante para simplificar los procesos de la empresa y generando contenido.

El Inbound Márketing es la clave
«Cuando tienes una tienda física, alquilas el establecimiento de la avenida principal y la gente te ve pasando por tu escaparate, pero aquí tienes que ir tú a tus clientes», dice Miguel. Y su estrategia es el Inbound Marketing, que consiste en la creación de contenidos atractivos en la propia plataforma que hace que los clientes entren a consultar y se vayan con la compra hecha. «Es una forma menos agresiva, porque la gente viene buscando recetas, a resolver dudas de cómo se utiliza un producto, etc.» y ellos se lo ponen fácil con herramientas como añadir al carrito todos los ingredientes de esa receta. O la foodipedia, un diccionario de ingredientes que estaba pensado desde el día en que a Miguel le regalaron aquel recetario y era incapaz de reconocer la mitad de los elementos.

«El márketing de contenidos nos ayuda a hacer branding, pero también a atraer posibles clientes, ya que muchos nos han dicho que nos encontraron buscando información sobre productos», admite Miguel.

«Estamos descubriendo que la uva Mencía es genial para maridar con cocinas distintas»

Entre las iniciativas innovadoras de Mercado Flotante está el ofrecer guías de maridaje para platos internacionales. Y es que la cocina internacional es muy compleja, sobre todo la asiática «donde suelen estar siempre presentes los 5 sabores: agrio, salado, dulce, amargo y picante; es difícil encontrar un vino que vaya con todo eso».

Por esa razón, en colaboración con el Instituto Galego do Viño publicarán las «reglas principales del maridaje para la cocina internacional». En ella explicarán qué tipo de uva y vino van con cada tipo de sabor, y darán ejemplos de vinos nacionales e internacionales para maridar con recetas específicas de la gastronomía mundial. «Nosotros les propondremos las recetas al instituto y ellos nos aconsejarán».

«Estamos descubriendo que la uva Mencía, muy popular en Galicia, es una uva genial para combinar» dice Miguel, que, como su compañera, es un gran aficionado al vino. «La uva Mencía,  por ser tan ecléctica y tener menos cuerpo, encaja muy fácilmente con muchos platos».

El sector del foodTech
Miguel y Lorea forman parte de ese porcentaje de emprendedores que se meten en la aventura por querer realizar un sueño. Lorea era gestora de proyectos culturales y Miguel trabajaba en mejora de procesos y calidad. Y ambos, amantes de la cocina internacional. «Nos gusta tanto lo que estamos haciendo que nos pasamos el día trabajando», reconoce. Se sienten motivados por ver que las cosas salen bien, que los clientes y los proveedores están satisfechos y que el proyecto avanza.

«No voy a decir que montar una empresa es tarea de superhombres, porque también hay supermujeres», bromea Miguel, pero acto seguido cuenta que deben atender a un montón de parámetros y resulta agotador mantener el ritmo. «Alguna vez hay que pararse a coger oxígeno».

Todas aquellas empresas que de una u otra forma mezclan alimentación con tecnología se encuentran bajo el paraguas del denominado FoodTech. «Desde hace 5 años, las inversiones en este sector se han disparado», dice Miguel. Y concluye «los analistas con los que trabajamos nos dicen que estamos sobre algo muy grande, y eso nos hace pensar que estamos en la cresta de la ola».

Bendita Cocina: convertir tu casa en un restaurante

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Galicia es un lugar en el que tradicionalmente la comida ocupa un lugar principal. Pero en los últimos años el despunte de este sector a nivel mundial ha sido inimaginable. Los cocineros son tratados como estrellas de rock, y los talent-shows de gastronomía acumulan grandes cuotas de pantalla. Nadie imaginaba que un oficio tan antiguo podría ponerse tan de moda.

«En el bar todos vamos de entrenadores y hablamos de fútbol como profesionales, y eso está pasando hoy en día con la gastronomía; ya todos sabemos lo que es una reducción» comenta Isaac Carrera, CEO de Bendita Cocina, una plataforma con sede en Nigrán con la que puedes contratar chefs que te cocinan en tu casa, empresas de cáterin y cenas en restaurantes. Un gestor de presupuestos gastronómicos.

Isaac es también CEO y co-fundador de Elemental Chefs, una agencia de comunicación que tiene un gran número de clientes de la industria alimentaria. Empresa de la que nace la idea. Por un lado por una campaña de la agencia para Galicia Calidade de hace varios años, en la que se sorteaban cenas preparadas por chefs profesionales en las casas de los ganadores.

Bendita Cocina

Por otro, por una experiencia de Eduardo Tejerina, el otro fundador de ambas empresas. Para su cena de fin de año quiso repetir esa dinámica y que un chef cocinase en casa de su cuñado. La cosa no acabó tan bien. «Cuando terminaron de cenar fueron a la cocina y aquello parecía Camboya», nos comenta Isaac, su socio. «Dejaron todo tirado, un desastre completo, y tuvieron que pasar el resto de la nochevieja fregando».

Cuando uno habla con Isaac se nota rápidamente que es una persona a la que le gusta arriesgar, probar e innovar. «Teníamos que sacar el departamento de online y nos pusimos a hacer pruebas con gaseosa; hicimos dos proyectos, nos aburrimos de uno y quedó este, que tenía mejor pinta». Así se crea Benditta Cocina, como un proyecto interno, con falsos chefs y menús que no existían. «Desarrollamos la web y la gente nos llamaba, por lo que teníamos que decirles que el chef al final no podía o que se había cancelado por alguna razón». Pero para ellos esto era una muestra de que el proyecto tenía sentido y comenzaron a avanzar en él. Buscaron chefs, buscaron menús y finalmente, clientes.

«Esto está pensado para presumir ante un cuñado»
«Es un rollo de competencia entre cuñados; así empezamos y así seguirá», dice Isaac. «Tu cuñado siempre fue a un restaurante mejor, al último estrella Michelín o tiene la última foto de Instagram mejor colocada que tú» explica, con el mismo estilo canalla del que está impregnada toda la comunicación de la plataforma. Saben que este es un servicio más caro que un restaurante, pero que tirar la casa por la ventana una o dos veces al año y «sentirte como Dios mientras un chef te cocina y tú te tomas un Gin-tonic en el salón· merece la pena.

No solamente vale para presumir, sino también para aprender. Puedes estar con el chef en la cocina, ver lo que hace y cómo lo hace y preguntarle cosas. De hecho, hay un porcentaje de clientes que buscan esa especie de formación.

En la plataforma se puede contratar el servicio de dos formas: o bien a la carta, buscando un chef o menú específico, o bien poniendo las características del evento y que sean los chefs que trabajan en el área los que nos ofrezcan sus menús.

No necesitamos una cocina especial para disfrutar de Bendita Cocina

No tenemos que tener una cocina especial. Con horno, microondas, fogones y nevera suelen ser suficientes. Y si necesitan algo más, lo llevan los cocineros. Lo mismo que los ingredientes, que los compran los propios chefs. «El feedback general es muy bueno, porque estás dispuesto a pasarlo bien». Los cocineros se marchan con los postres sobre la mesa y la cocina impecable.

Para los fundadores de Benditta Cocina y Elemental Chefs, esta plataforma es una manera de hacer aquellas cosas que desde la agencia de comunicación no se atreven a proponer a sus clientes. «En este país tenemos la costumbre de convertir las start-ups en empresas demasiado pronto, restando capacidad de experimentación», comenta Isaac. Pero admite que ellos pueden hacerlo porque Benditta Cocina no es el pilar de su economía.

«Sabemos que es un proyecto rentable -humildemente, pero rentable-, pero lo que queremos es ser referentes». Por eso la empresa evoluciona desde el comienzo. De los servicios a domicilio pasaron a ofrecer paquetes de cenas a grandes empresas, como Rectoral de Amandi, Mahou o la propia Galicia Calidade. Y tras pasar por la acelaradora Via Vigo añaden servicios como el de cáterin y restaurantes, porque «la gente empezaba a contactarnos para una boda o una comunión, y no puedes mandar a un chef solo a cubrir ese evento».

Actualmente siguen planteándose proyectos nuevos, como un chef personal que haga una auditoría de tu nevera, te organice los tuppers y te ayude a comer mejor. O un «chef a ciegas», que es que por ciento cincuenta o doscientos euros, un cocinero viene a tu casa y cocina con lo que tengas. «Puede llevarse una sal maldón, un aceite o unas conservas», pero la idea es un juego cliente-chef. Aunque adelantan que no saben si habrá mercado para esto.

Entre las tareas de futuro también está la mejora de los procesos, de automatización del trabajo con restaurantes y cáterin «sin complicarles la vida». Y en general «arreglar marrones«, comenta Isaac.

Sin embargo, lo que subyace siempre es que «para nosotros Benditta es un campo de pruebas, y no tenemos ni idea por donde vamos a salir».

Matprint, innovación para la medicina del futuro

Las investigaciones realizadas en el Instituto de Cerámica de Galicia, perteneciente a la USC, desde hace tres décadas son la base de un nuevo proyecto empresarial que se está gestando en los últimos tiempo. Matprint es el nombre de esta iniciativa que apuesta por la comercialización de biocatalizadores e implantes, realizados mediante impresión 3-D, que podrían aplicarse en la regeneración ósea de pacientes que han sufrido diversas enfermedades.

Biocerámica para rexeneración ósea
Biocerámica para rexeneración ósea

“Lo que hacemos ahora es modificar las estructuras de estos implantes pero no se cambian los materiales. Si  el proyecto sale adelante no será necesario hacer ensayos clínicos en humanos porque el material es el mismo”, indica Guitián, quien recuerda que los implantes de Keramat ya cuentan con autorizaciones para su comercialización en Europa y Estados Unidos.

En estos momentos se están realizando ensayos en animales y con la colaboración del CIQUS se han probado los catalizadores en síntesis de medicamentos. “Ahora el tema está en ver si estos nuevos implantes y biocatalizadores pueden ser rentables a nivel industrial o semi-industrial. La idea sería crear una empresa para comercializarlos o bien vender patentes”, señala Guitián.

Matprint ha obtenido una ayuda de algo más de 240.000 euros por parte del programa Ignicia para su desarrollo. En julio del próximo año se sabrá si es posible llevar a cabo el proyecto de comercialización que quieren realizar los autores del proyecto.

Los implantes que desarrolla Matprint podrían utilizarse para la regeneración ósea de personas que hayan sufrido accidentes o tumores en los que los huesos se hayan visto afectados. El propio Instituto de Cerámica provee el hueso artificial para realizar los implantes y el trabajo de los investigadores se centra en el desarrollo de las estructuras que facilitan que las células se acaben desarrollando en el material implantado.

Según indica Guitián, Matprint colabora con el Instituto de Investigación Sanitaria (IDIS), dónde se realizan los ensayos, y también con el CIQUS. En total hay seis investigadores principales que participan en el proyecto y otras diez personas que colaboran con él mismo.

Matprint ha obtenido una ayuda de más de 240.000 euros del programa Ignicia

Una de las líneas de investigación en las que se está trabajando actualmente es la mejora de los sistemas de producción de los implantes para que sean más eficaces. De esta forma, además, se obtendrá un mayor número de piezas y se podrá comprobar con mayor fiabilidad su funcionamiento.

Guitián apunta que el Instituto de Cerámica lleva trabajando desde los años 80 en biocerámicas y en los últimos años también lo ha hecho en soportes para catalizadores. La larga experiencia del Instituto en este terreno (han puesto en marcha diversos proyectos similares) es un aval para conseguir que el reto de comercializar estos implantes mejorados pueda finalmente llevarse a cabo.

Peryco: los comparadores llegan a la belleza

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La proliferación del comercio online ha favorecido que los consumidores tengan acceso mucho más rápidamente a la información de los productos que desean comprar. Y que además puedan obtenerla en el momento previo de la compra. Lo que fomenta la comparación de productos, modelos, marcas, puntos de venta y, sobre todo, precios.

Para facilitarnos aún más las cosas y no tener que visitar múltiples plataformas, se crearon los comparadores. Y en 2016, Peryco -acrónimo de Perfumería y Cosmética- llega a cubrir un sector en el que prácticamente no existían: el de la belleza.

Consola de Peryco.
Consola de Peryco.

En una primera fase se compara el precio de los perfumes, pero al venir en distintos tamaños debemos valorar también la cantidad en cada frasco. «La gente tiende a pensar que a mayor cantidad, más barato, pero en perfumería eso no es siempre cierto», explica Manel Soto, CEO y fundador, junto a su hermano Jordi y a Sandra Pena, de Peryco.

Al hablar de comparar perfumes no hablamos de comparar fragancias, sino de ver cuál de los envases contiene mayor concentración. Tenemos dos tipos principalmente: un EDT (Eau de Toilette) o un EUP (Eau de Parfum). «No existen valores de concentración establecidos por la industria, pero sí rangos», comenta Manel. Y de esta forma, un EDT tiene menos concentración que un EDP. Será nuestra decisión, bajo nuestro personal gusto olfativo elegir cuál de los dos tipos queremos.

Además de fragancias y cosméticos, Peryco está incorporando también ofertas en centros de belleza. A día de hoy cuenta con 100 centros, pero esperan llegar a los 2.000 en marzo.

Romper con la estacionalidad
El origen de la idea, como tantas otras, nace de la propia experiencia de Manel al buscar por internet un perfume para regalar en unas navidades. Tanto él como su hermano Jordi, ambos provenientes del web scraping para otras marcas (técnica utilizada para sacar información de un sitio web), se dieron cuenta de que no había una herramienta que facilitara la enorme labor de compara precios.

«Al principio tuvimos que luchar contra muchas marcas y tiendas, que son las que marcan los precios, y puede que haya sido lo más complicad», reconoce Manel. Sin embargo, lo que les ha permitido crecer y diferenciarse del resto es que han desarrollado su propia base de datos y no dependen de ninguna tienda para poder tener acceso a la información. «Hay algunas páginas y marcas que nos avisan de algún cambio, pero otras no».

Peryco ya prepara su expansión a Francia y a Latinoamérica

Además, la mayor parte de las ventas de perfumes se hacen en navidad o en el día de la madre, por lo que es complejo mantener una empresa así. Por eso han ido diversificándose, añadiendo cosméticos y tiendas de belleza.

La empresa, que opera en España con un tráfico mensual de 60.000 personas, está lista para salir al exterior. La web ya está montada y la expansión a Francia bajo una nueva marca, wibeti, era inminente. «Pero nos dimos cuenta en el programa Via Galicia que teníamos que mejorar cosas», admite Manel. «Es mejor hacernos fuertes aquí que darnos una torta ahí fuera». Tras Francia abordarán Latinoamérica, con México, Brasil y Chile como zonas principales.

La fuente de ingresos de Peryco es como la de otros buscadores y comparadores: coste por clic y coste por cada venta cerrada. Y son optimistas, porque saben que la tendencia es hacia el aumento del comercio online. Y por tanto, de este tipo de servicios.

Una de los retos de Peryco a ojos de Manel, es la dificultad para encontrar buenos y experimentados desarrolladores. «No es que no los haya, es que o están en Madrid o Barcelona o en empresas potentes del sector» con las que una start-up como Peryco no puede competir en cuanto a salarios.

Y aunque han recibido financiación de la aceleradora de Via Galicia, la necesitan como un importante colchón para poder empezar la empresa y comenzar a subcontratar servicios. «Aquí tienes que saber hacer de todo, pero la calidad se paga». Para ellos el futuro y la esencia de Peryco está en pasar de un comparador a una comunidad, y de ahí a un market.

Por lo pronto, en la nueva actualización implementada en el mes de noviembre, se facilita la búsqueda de cosméticos de los que desconozcamos marcas o modelos. «Si estás buscando una crema solar, que sepas qué modelos y marcas hay».